Comienza en el mundo del vino en Alemania en 2008 con unas prácticas de fin de grado de Ingenería Agrícola en una bodega mientras seguía estudiando colateralmente música.

Estuvo en una bodega muy pequeña donde tenía que hacer de todo y le dio una visión completa de cómo se gestiona un proyecto integral de vino. En ese mismo verano se fue a Cuba, a las afueras de la Habanaa hacer un curso de agroecología y desarrollo rural y cambió por completo su percepción de la agricultura y odviamente, también de la música.

Cuando vuelve a España, hace otras prácticas en Vega Sicilia para después marchar a Argentina y Uruguay a visitar bodegas y seguir ampliando su conocimiento vitivinícola. Cuando vuelve a España, se encuentra con un amigo violinista que vivía en París, le da a probar un montón de vinos naturales y de pronto...¡flipa en colores! De pronto toma sentido y conecta totalmente.

Todo el vino que había conocido anteriormente era convencional y no terminaba de conectar con él.

Ahí empieza a idear su proyecto vinícola. Compra viñas y comienza a hacer su propio vino. Julia viene de una familia sin arraigo al vino y todo lo que tiene y sabe lo ha aprendido por experiencia propia.

Coge el GPS, se planta en Bullas, Murcia, y empieza su proyecto. Al principio no fue nada fácil, pero tras mucho esfuerzo consiguió lanzar sus primeros vinos, todos realizados con uvas de pequeños propietarios de la zona, mientras consigue su propio viñedo.

Una clara representación del paisaje, territorio y sabor de esa zona de España.